La nueva Ley 7/2023 de Protección de los Derechos y el Bienestar de los Animales ha supuesto una ampliación sustancial de las obligaciones y responsabilidades de las administraciones locales, principalmente los ayuntamientos, en relación con la presencia de animales de compañía en sus municipios. A las competencias anteriores, como la recogida de animales perdidos o abandonados de la vía pública, la mayoría perros y gatos, se suman en esta nueva ley, entre otras, una nueva competencia que podemos considerar de profundo calado por cómo afecta a todos los municipios de España, por las grandísimas dificultades por parte de las administraciones responsables, para ponerlas en marcha.