Los delfines mulares (Tursiops truncatus), conocidos popularmente como marrocs, han convertido la costa de la Serra d’Irta, entre Peñíscola y Alcossebre, en uno de sus escenarios favoritos y en un santuario marino. Durante las últimas semanas de agosto, el personal del parque natural y los guardacostas de los Espacios Naturales Protegidos Marinos de la Comunitat Valenciana han registrado múltiples avistamientos de estos cetáceos en aguas comprendidas entre Peñíscola y Alcossebre.