Uno de los problemas que más preocupa actualmente a los veterinarios de los municipios que sufrieron las inundaciones del pasado 29 de octubre es «la enorme cantidad de humedad que ha quedado tras la dana, combinada con el calor, que está favoreciendo la proliferación masiva de parásitos: pulgas, garrapatas y mosquitos», explica Maria Victoria, de la Clínica Veterinaria Sedaví. En particular, alerta, al igual que lo señala Sonia Burguet, de Innova Veterinaria, sobre la leishmaniasis, causada por un mosquito cuya reproducción se ha visto facilitada por el elevado nivel freático en la zona.