“El sector veterinario es una de las principales garantías para evitar que se produzcan enfermedades de transmisión alimentaria. Gracias a su labor, en España los casos son muy reducidos y se localizan de forma abrumadoramente mayoritaria a tiempo para avisar a las autoridades y a la población y retirar los productos que presenten algún tipo de problema”. Así lo subraya Luis Alberto García Alía, presidente del Colegio de Veterinarios de Toledo y del Consejo de Colegios Veterinarios de Castilla-La Mancha.