La fiebre del Nilo Oriental (FNO) ha llegado a Castellón. El pasado 21 de noviembre se detectó la presencia de este virus en un caballo de la capital de La Plana, siendo este el primer caso confirmado de toda la Comunitat Valenciana. En las últimas fechas de noviembre también se ha ratificado otro nuevo foco en la provincia de Lérida.

El Programa nacional de vigilancia en animales detectó los primeros resultados serológicos positivos a FNO de 2020 en équidos centinelas muestreados en el mes de julio en la Comunidad Autónoma de Andalucía, y desde entonces se han confirmado y notificado en España un total de 139 focos en équidos en las provincias de Sevilla, Huelva, Cádiz, Jaén, Badajoz, Cáceres, Castellón, Lleida y Tarragona, resultando afectados 147 caballos. 8 de estos casos se han detectado por vigilancia activa (animales centinelas que seroconvirtieron), mientras que los restantes (131) se han detectado por vigilancia pasiva al presentar los équidos síntomas compatibles con la enfermedad.

La Conselleria de Agricultura, Desarrollo Rural, Emergencia Climática y Transición Ecológica ha reforzado la desinfección y la vigilancia epidemiológica tras el caso de Castellón. La administración autonómica ha puesto en marcha el protocolo establecido para estos casos por parte del Ministerio del ramo con la limpieza a fondo de las instalaciones que albergan al caballo afectado y el muestreo de todos los cercanos al mismo, así como de otros animales localizados en las zonas colindantes para detectar si se hubieran podido producir más transmisiones.

Y es que, según explica el entomólogo, presidente de la Asociación Europea de Control de Mosquitos y director técnico de Lokímica, Rubén Bueno, “ahora hay que detectar dónde está la transmisión e intervenir para frenar la proliferación a través del vector de los mosquitos”, algo que según señala “ya se está haciendo” con las múltiples fumigaciones.

Además, matiza que “será necesario ver los pormenores de la positividad detectada en Castelló”, así como que al virus “le cuesta multiplicarse con temperaturas más bajas”, tal y como evidencian los datos del registro de alertas del Ministerio de Agricultura, que contabilizaron 69 focos de fiebre del Nilo durante el mes de septiembre y 34 en el mes de octubre frente a los únicos tres en lo que va del presente noviembre.