Los organizadores cifran en 3.000 los veterinarios llegados de todo el país a la concentración

La mañana del martes, 18 de noviembre, en Madrid volvió a ser la capital de las batas blancas/azules y cazos resonando frente a la sede del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación (MAPA) en Madrid. Veterinarios llegados desde distintos puntos de España se unieron para expresar su profundo malestar ante una normativa que consideran “desproporcionada”,»alejada de la realidad clínica diaria» y que «ignora el criterio clínico» de estos profesionales a la hora de prescribir, especialmente antibióticos. Entre los asistentes -casi 3.000, según los organizadores- estuvo la presidenta del Colegio de Veterinarios de Valencia (ICOVV), Inmaculada Ibor, quien encabezó una delegación de decenas de colegiados desplazados desde Valencia -la mayoría de ellos en tren- que también participaron activamente de la protesta sosteniendo varias pancartas, algunas de ellas ya usadas en varias de las manifestaciones realizadas antes del pasado verano en la propia capital del Turia. Como se recordará, el ICOVV acordó respaldar esta movilización y ofreció a sus colegiados asumir parte de los gastos del desplazamiento.

Imagen de la multitud frente a la sede del Ministerio de Agricultura

Convocada formalmente por la propia la patronal nacional de centros clínicos, CEVE, por el Colegio de Veterinarios de Madrid (Colvema) y por la Federación Estatal de Sindicatos Veterinarios (Fesvet), la protesta contó con el respaldo unánime de todos los miembros del Comité de Crisis Veterinarios, donde también está representada la Organización Colegial Veterinaria (OCV). Los veterinarios congregados llevaron a cabo una cacerolada simbólica y se leyó un manifiesto que exigía la reforma o incluso la derogación del polémico decreto 666/2023, importantes cambios en algunos artículos de la regulación del medicamento veterinario y la apertura para todo ello de un diálogo «real» con el MAPA, muy especialmente pero también con el Ministerio de Sanidad.

A lo largo del acto, intervinieron varias figuras clave del sector. Entre ellos, Felipe Vila, presidente del Colegio de Veterinarios de Madrid (Colvema), quien denunció lo que llamó un “desprecio claro” por parte del departamento de Luis Planas hacia la profesión veterinaria: “No han hecho nada”, aseguró, acusando a las instituciones de falta de voluntad para atender sus demandas. En esta misma línea, Gonzalo Moreno del Val, presidente de la OCV insistió en la necesidad de que se reconozca que “detrás de cada receta, urgencia o tratamiento hay profesionales que merecen respeto, seguridad y reconocimiento”. Motivos por los que reclamó una normativa que se adapte a las condiciones «reales» de su trabajo y les permita «aplicar la evidencia científica».

Falta de avances

En un momento especialmente tenso, la veterinaria Tania Ortiz -quien también pronunció unas palabras ante los manifestantes- denunció la frustración acumulada tras meses de reuniones “solo de apariencia”: “Nos siguen atando con una norma injusta, ineficaz y desproporcionada”, afirmó, añadiendo que los veterinarios se enfrentan a un dilema diario: “¿Curar o pisar el filo de una ley absurda?”. Ortiz, como el resto de comparecencias y líderes del colectivo veterinario, recordaron en este sentido cómo han transcurrido casi seis meses desde que el Parlamento instó al MAPA a abrir un proceso de diálogo con el colectivo sin que hasta el momento se hayan consumado «demasiados avances».

De izqda a dcha, Inmaculada Ibor (ICOVV), José Antonio Luque (pte del Col. de Málaga) y Gonzalo Moreno del Val (pte de la OCV)

La veterinaria resumió la situación afirmando que “los veterinarios seguimos atados por una norma injustaineficaz y desproporcionada, que pone en riesgo la salud animal, la salud pública, de la que también somos garantes, y el futuro de una profesión esencial”. Asimismo, añadió una crítica a la incoherencia legislativa: “Los animales son seres sintientes según su ley de bienestar animal, ¿no? Dejen de gravarles el IVA a su atención y cuidados cuando enferman como si fueran cosas”.

En este sentido, Moreno del Val confirmó que la propia nueva movilización realizada pone de manifiesto que «aún no se han conseguido los cambios normativos que nos permitan trabajar adecuadamente» por lo que consideró necesario recordárselo a las autoridades competentes, como especialmente al Ministerio de Agricultura. Pese a ello, se mostró optimista, y confió en que pronto se lleve a cabo una reunión con este departamento para abordar a fondo este tema. “Esperamos que pueda ser dentro de poco y que, cuando nos podamos reunir con ellos, la situación haya cambiado respecto a meses atrás”, manifestó.

¿Más movilizaciones?

Tras retomar el calendario de movilizaciones el pasado 9 de noviembre en Barcelona y continuarlo este pasado día 18,  el acto concluyó con el presidente del Comité de Crisis Veterinario, Manuel Martínez, quien agradeció la movilización y prometió continuar con la presión: “Seguiremos, haremos más manifestaciones, ¡las que hagan falta!”, dijo.

Ver vídeo reel de la manifestación